Tras casi 25 años siendo uno de los referentes en la alimentación cordobesa, la Perla se reformula con un nuevo enfoque orientado a la hostelería de gran consumo, catering y especialmente al consumo para casa.

Equipo de dirección técnica y comercial de La Perla

El pasado martes celebró una presentación de su nueva filosofía, imagen y línea de productos ante la red de colaboradores y equipo comercial nacional e internacional en la Taberna La Viuda. Una evolución de imagen, con cambio de logo y denominación, como punta de lanza del resto de cambios en la empresa, con cuatro gamas de productos diferenciados y cuatro marcas dentro el mismo ecosistema: Artcooking (para los paladares más exigentes), La Perla Artesana (los sabores y elaboración de toda la vida), Ideal Tapas (nunca una marca fue tan descriptiva) y Rápido y Buenísimo (con propuestas fáciles y ricas para el día a día).

La empresa actualmente está inmersa en una auténtica revolución con la incorporación de nuevos fichajes en los departamentos de calidad, innovación y operaciones, dando un nuevo impulso para crecer en uno de los momentos más complicados de los últimos tiempos y afianzándose en el sector de la industria alimentaria, produciendo íntegramente desde Córdoba y sirviendo al resto del mundo.

La presentación, conducida por el director general de la Perla, Javier Paniagua, se basó en la cata dirigida tanto de los nuevos productos como los que se mantienen por su alta demanda. Se hizo un especial hincapié en analizar las sensaciones y experiencia de consumo que generaban en todos los asistentes, tratando de lograr aunar opiniones y percepciones; en boca del propio Javier: “Lo realmente importante para nosotros es lo que provocamos al cliente en cada bocado de cualquiera de nuestros productos, ese sabor, esa buena experiencia es lo a todos nos hace repetir y eso es lo que buscamos en cada persona que nos prueba»